Cuando las empresas tienen un problema de colapso en sus cajas de cartón, es común que lo primero que hagan sea incrementar la resistencia de las cajas. Esto tiene mucho sentido, porque a mayor resistencia de una caja, menor será la probabilidad de que colapse. Sin embargo, este incremento de resistencia implica un mayor costo.
Lo primero que se debe hacer es conocer las características que requieren nuestros productos para ser empacados: su peso, sus dimensiones, su fragilidad, si están expuestos a humedad, entre otras.
Revisando los puntos anteriores, se debe pedir a los proveedores las especificaciones técnicas del cartón que se necesitará para el empaque y embalaje, que cumplan con los requerimientos que cada producto necesite. No solamente las dimensiones, sino también su resistencia, absorción de humedad, entre otras.
Verificar que las cajas de cartón cumplan con los requerimientos necesarios para el almacenamiento y transportación de sus productos, evitará aumentar los costos al pedir cajas que excedan estas características, o que, por el contrario, puedan ocasionar colapso y provoquen pérdidas.
Afortunadamente existe una forma muy sencilla de solucionar el problema, mediante un control de calidad de las cajas de cartón utilizando un equipo especializado que mide y verifica su resistencia.
¿Te gustaría saber si estás utilizando una resistencia menor o mayor a la que deberías?
Nuestros compresómetros te pueden ayudar a realizar las pruebas ECT o BCT bajo la norma Internacional TAPPI, para que puedas estar seguro de cuál es la resistencia óptima para tu empaque y así no gastes de más.
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